El combate permanente en contra del narcotráfico en México, emprendido por el Gobierno Federal en Diciembre del 2006, ha cobrado la vida de 372 elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional durante los enfrentamientos contra civiles armados, siendo Tamaulipas el Estado que encabeza esta lista con 110 militares muertos por agresiones de arma de fuego o ejecuciones, es decir un 29.57 por ciento del total en México, lo que ha convertido al estado en prácticamente un infierno para la milicia mexicana, pues el estado que más se le acerca es Sinaloa en donde se han reportado 47 militares abatidos, la mayoría de ellos a principios de este 2023, en el operativo para capturar Ovidio Guzmán, según documentos en manos de este medio informativo.
La cercanía con Estados Unidos y el tener el mayor número de puentes internacionales de México han hecho a la frontera de Tamaulipas una de las zonas más peligrosas y en donde en promedio, según el INEGI, más del 40 por ciento de su población vive con miedo, sin embargo también para los militares mexicanos ha sido la zona más peligrosa para cumplir con su misión de combatir el narcotráfico en el país, siendo Nuevo Laredo y Reynosa los municipios donde más militares han muerto en manos de civiles armados con 30 bajas en cada uno.
La muerte de militares en tierras tamaulipecas iniciaron en el 2008 cuando fueron reportados cuatro soldados muertos, el primero de ellos un 30 de Abril en el municipio de Mier, dos más en Reynosa y uno en Burgos, durante Septiembre y Octubre de ese año. Dos años más tarde, en 2010 la violencia en Tamaulipas fue aumentando y con ella los asesinatos de militares, pasando a 23 la mayoría de ellos en la zona fronteriza, 10 de ellos en la frontera chica, conformada por los municipios de Mier, Miguel Alemán, Camargo, Díaz Ordaz y Cd. Guerrero, colindantes con la Ciudad de Reynosa y Nuevo Laredo, en donde murieron 8 y 2 elementos respectivamente. Ese mismo año asesinaron a dos soldados en Matamoros y uno más en la capital, Ciudad Victoria.
La mitad de la cifra de elementos asesinados en Tamaulipas sucedieron durante la crisis de seguridad que vivió el estado en los años 2010, 2011 y 2012, cuando mataron a 54 militares que combatían a los carteles que operaban en la entidad, principalmente en la frontera con Estados Unidos, pues seguidos de Reynosa y Nuevo Laredo se encuentran los municipios de Mier y Miguel Alemán con siete soldados asesinados cada uno.
En el resto del país, aunque en menor cantidad también han ocurrido bajas de militares en manos de criminales, siendo Guerrero, Michoacán y Jalisco con 28, 24 y 20 elementos asesinados los que completan los cinco estados más peligrosos para la SEDENA.
El 2013 es el año en que más militares han sido asesinados en el primer bimestre del año con 15 bajas reportadas por la Secretaría de la Defensa Nacional, cifra que superó al 2011, hasta entontes el peor inicio de año con 11 elementos abatidos.