El diplomático fue asesinado durante una visita a la exposición fotográfica, Rusia vista por los turcos, según se desprende de las imágenes emitidas en las televisiones locales. El atacante gritó «Alá es grande, Alá es grande. Alepo, venganza», como se puede escuchar en el vídeo del incidente.
Las fuentes de la embajada rusa en Ankara han indicado que puede tratarse de un ataque de islamistas radicales. Este incidente se produce en la víspera de una reunión en Moscú entre los ministros de Exteriores de Rusia, Irán y Turquía para tratar sobre el alto el fuego en Alepo, al norte de Siria.