La Diócesis de Tampico cuenta con dos sacerdotes exorcistas, pero hasta el momento no se ha requerido de sus servicios.
El Vicario General de la Diócesis, Daniel Zapata Huesca, indicó que se trata de dos sacerdotes de la región, quienes fueron elegidos para atender este tipo de situaciones.
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“Toda diócesis debe de tener uno o dos exorcistas, y ellos son personas preparadas tanto doctrinalmente como espiritualmente y normalmente son sacerdotes mayores que han tenido una experiencia tanto humana como espiritual, son sacerdotes de la Diócesis, originarios de la diócesis de Tampico que abarca varios municipios, empieza desde Xicoténcatl, Antiguo Morelos hasta la zona sur”.
Resaltó que se debe saber distinguir si se trata de una cuestión psicológica o algo que lo sobrepasa, es decir, si es cuestión del mal.
Expuso que lo primero que se debe de hacer es llevar a la persona afectada con un psicólogo, quien determinará si es algo que está dentro de sus alcances.
Añadió que la voz de alerta puede ser una conducta atípica en la persona, lo cual puede sobrepasar los parámetros normales del carácter de alguien.
